LOS LAZOS
Envueltas en papel estaño se funden piedras ambarinas,
perdidas en la inmensidad gris de nuestro espacio.
No pueden traspasar el entramado estricto que lo preserva.
Eterna y amarga sonrisa
surcando labios.
Acongojan los lazos y una ráfaga de viento gélido
serpentea en las venas.
Perlas heladas
que forman níveos y tupidos encajes
imposibles de deshacer.
- Araceli García - (Palma de Mallorca)